
Tom Brady revela por qué no puede volver a jugar en la NFL
diciembre 12, 2025
A sus 48 años, Tom Brady sigue siendo una figura importante en el mundo de la NFL. Aunque el considerado mejor jugador en la historia asegura que físicamente está en plenitud para volver a los emparrillados, existe un obstáculo que lo mantiene fuera: su rol como propietario minoritario de los Raiders.
Tom Brady lo explicó sin rodeos.
“Estoy listo y podría volver, pero ya no me lo permiten porque soy propietario minoritario de los Raiders; así que no puedo salir del retiro”, reconoció.
Brady, actualmente analista estrella de FOX Sports, también habló sobre el sorprendente regreso de Philip Rivers, quien a los 44 años salió del retiro para firmar con los Indianapolis Colts tras cuatro años lejos de la liga. Lejos de mostrarse impactado, señaló que confía en que el veterano quarterback llegará en buen nivel.
“Si Philip ha estado practicando y haciendo lo que debe hacer, lo veremos en plenas facultades y dando una gran exhibición ante los Seattle Seahawks el próximo domingo”, apuntó.
Para Brady, la edad no es un impedimento definitivo para desempeñarse como quarterback. Recordó un viejo principio que aprendió en su etapa universitaria con los Michigan Wolverines: “La mente es a la física como cuatro es a uno en la posición de quarterback”.
A partir de esa idea, explicó que el verdadero cuestionamiento para alguien que desea volver no está en su lectura del juego, sino en su capacidad para resistir golpes, lanzar bajo presión y ganar tiempo en la bolsa de protección. “Si la respuesta es sí, estás dentro”, resumió.
El exmariscal también aprovechó para bromear sobre la decisión de Rivers, señalando lo paradójico que puede ser “desretirarse” para retirarse de nuevo.
“¿Quién se retira, para luego volver y después irse de nuevo? Es ridículo que Rivers haga eso”, dijo entre risas.
Cabe recordar que él hizo lo mismo en 2022, cuando anunció su retiro, solo para regresar 40 días después y jugar una última temporada con los Tampa Bay Buccaneers.
Hoy, Brady tiene claro que esa puerta está cerrada, no por falta de ganas ni de estado físico, sino por un nuevo rol que lo ata a la NFL de una manera distinta.











