
diciembre 23, 2025
Carlos Guzmán | Corresponsal CDMX.- La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que ya no se cobrará el impuesto a los videojuegos, pese a que éste quedó incluido en la Ley de Ingresos, al reconocer la dificultad para aplicarlo de manera justa y diferenciada.
“Ya no se va a cobrar ese impuesto, voy a explicar por qué. Yo había pedido que se quitara el impuesto sobre videojuegos y al final no se quitó de la Ley de Ingresos y quedó”, explicó la mandataria, al subrayar que resulta muy complejo distinguir entre un videojuego con violencia y uno que no la tiene, lo que vuelve inviable su correcta aplicación.
Sheinbaum señaló que el debate no debe centrarse en un cobro fiscal, sino en la regulación del contenido, particularmente aquel que promueve la violencia, un tema que —dijo— debe analizarse con mayor profundidad y responsabilidad.
En este contexto, el secretario de Salud, David Kershenobich, advirtió que el componente más preocupante en los videojuegos actuales es la violencia, fenómeno que ha crecido de manera significativa en los últimos años.
“Lo importante es el componente de violencia, ese es el aspecto más relevante y es un fenómeno nuevo; no había mucho en 2016 comparado con lo que hay ahora”, explicó el funcionario, al señalar que si bien los videojuegos también tienen aspectos positivos, es necesario revisar y regular su contenido.
Kershenobich añadió que datos recientes de encuestas muestran que, en muchos casos donde existe violencia, también hay consumo de drogas o alcohol por parte de quien la ejerce, lo que refuerza la necesidad de un análisis integral para la toma de decisiones públicas.
Ambos funcionarios coincidieron en que la información recabada permitirá definir medidas de prevención y regulación, sin recurrir a un impuesto que resulte difícil de aplicar y que podría generar efectos indeseados.
Con ello, el gobierno federal descartó el cobro del gravamen a los videojuegos y abrió la puerta a un enfoque distinto, basado en la revisión del contenido y la protección de la salud y el bienestar, especialmente de niñas, niños y jóvenes.











