
septiembre 11, 2025
Carlos Guzmán | Corresponsal CDMX.- La nueva Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) celebró este jueves su primera sesión jurisdiccional con la integración de ministros electos por voto popular el pasado 1 de junio. El encuentro, que se extendió por cuatro horas, estuvo marcado por estrenos, tensiones y desorden en los procedimientos, con apenas tres de los quince asuntos previstos resueltos.
El ministro presidente Hugo Aguilar Ortiz inauguró la sesión con un mensaje en mixteco, su lengua natal, sin declarar el quórum y con su primer golpe de mallete. Aunque participaron los nueve ministros, solo ocho estuvieron presentes en el salón, ya que Arístides Rodrigo Guerrero García se conectó a distancia por convalecer de un accidente vial.
Por primera vez desde marzo de 2020 se permitió el acceso de público y prensa al Salón de Plenos, lo que incluyó estudiantes y periodistas. La sesión también mostró signos de cambio y desconcierto: propuestas de última hora trabaron votaciones, un ministro confundió al presidente llamándolo “magistrado”, y la voz institucional que desde 2005 presentaba los debates de época de Norma Piña ya no apareció.
El primer caso analizado fue la acción de inconstitucionalidad 186/2023, un proyecto de la ministra Yasmín Esquivel Mossa contra leyes estatales de salud de Chihuahua. La Corte suavizó el criterio que obligaba a invalidar leyes por falta de consulta a personas con discapacidad, determinando que no será una regla automática sino que deberá revisarse caso por caso.
Este cambio fue considerado un triunfo para la ministra Lenia Batres Guadarrama, quien desde su llegada en diciembre de 2024 criticó que el Pleno anterior anuló 56 normas —muchas de ellas progresistas— solo por incumplir dicho requisito, lo que afectó derechos indígenas. En contraste, el proyecto original de Esquivel planteaba mantener el criterio anterior.
Durante el debate, Aguilar asumió un papel conciliador y respaldó a Batres. “Invalidar la norma por el solo hecho de que no hubo consulta le estaría dando un nivel más alto al derecho procedimental sobre el derecho sustantivo”, señaló el ministro presidente. Con ello, se alineó con la postura que busca dar mayor peso a los efectos de fondo que a las formalidades.
La sesión, sin embargo, estuvo marcada por irregularidades. Los ministros ignoraron el reglamento de sesiones publicado en el Diario Oficial de la Federación una semana antes, al discutir acciones de inconstitucionalidad en lugar de temas administrativos y laborales. También rebasaron los tiempos límite fijados para cada intervención, mientras el cronómetro oficial se convirtió en mero adorno ante la permisividad del presidente Aguilar.











