septiembre 2, 2025
*Asociación Nacional llama a padres y tutores que ante un caso se denuncie ante las fiscalías para evitar encubrimientos
Yhadira Paredes/Xalapa, Ver.- Existe un subregistro de menores abusados o acosadas al interior del sistema educativo ante la falta de denuncias por parte de los padres de familia o tutores y el encubrimiento de las autoridades educativas y organizaciones sindicales, alertó Alejandro Águila Argüelles, presidente de la Asociación Nacional de Padres de Familia.
Reconoció que existe preocupación por estos casos y llamó a los padres y madres de familia a denunciar ante las Fiscalías Estatales y no solo reportarlos a las autoridades de Educación.
“Los casos existen a nivel nacional, ¿Cuál es el gran problema? Que los papás condicionados o miedosos no denuncian, porque los directores, en el brete de que la ropa sucia se lava en casa, no hay denuncias y por eso no hay estadística, yo lo que hago es un llamado a los padres de familia a que denuncien, que presenten la denuncia no ante la Secretaría de Educación, porque no es competente, todo el personal de la SEP es personal sindicalizado y el refrán dice perro no come perro”.
Sostuvo que los menores abusados se enfrentan a una red de encubrimiento, indiferencia y poca voluntad política para terminar con este lastre, a pesar del anuncio de Mario Delgado, secretario de Educación federal, de la creación de un registro nacional de acosadores en las escuelas.
“Que los papás denuncien, pero que vayan ante la fiscalía a denunciar no ante la secretaría, porque no es autoridad competente para sancionar. Hay que ir a las fiscalías y verán cómo se empezará a actuar.”
El presidente nacional consideró que es necesario que se haga una denuncia penal para que la víctima cuente con los estudios periciales médicos y se siga curso a las denuncias.
Y es que, lamentó, que ante la denuncia solo ante la SEP la sanción para un abusador o quien se roba dinero, es meramente administrativa, una mala nota o suspensión de 12 años de su trabajo, pero se requiere ver en la cárcel a ese tipo de delincuente para poner a salvo a los niños y niños.
